El universo no trabaja de forma circular, me explico, el universo es un invento de la mente humana para tratar de explicar fenómenos que no se entienden en su origen...
El universo no trabaja de forma circular, sino de manera toroidal, si tú generas, tu recibes, si tú te amas sentirás como la vida te abraza a través de diversas instancias, personas o sucesos, en contraste, si te encuentras en contra de ti misma, el universo te devolverá lo que tú enviaste, tu propio desamor vestido en la forma de un hijo, padre o pareja desconsiderado.
Carl Jung afirmaba que somos el dador de nosotros mismos, y esto se fundamenta en base al cómo nos observamos y en consecuencia, al cómo nos tratamos.
Si no sabes que te das o cómo te ves, pon atención al cómo te sientes. El darte no tiene que ver con lo que das, sino con el darte. El universo es un campo de energía que se activa y produce lo correspondiente a nuestro diálogo interno predominante. Por eso se recomienda tener cuidado con lo que piensas de ti, porque eso es lo que estás propiciando para que se convierta en una realidad.Si no sabes que generas, presta atención a lo que vives. Nada sucede por azar, ni por castigo o mala suerte. Todo obedece a una perfecta correspondencia.
Quien fomente la necesidad de amor vivirá en una continua incoherencia al fomentar su propia negación, propiciando con esto más de lo mismo a lo largo de su vida.
El drama de la gente que vive sin amor obedece a su propio desamor.
Tonta-mente se supone que el amor es una mercancía que hay que dar para luego recibir.
El amor no es un círculo, sino un toroide, si no lo generas, nunca lo vivirás.
Tener la necesidad de amor no es sinónimo de crecimiento ni equilibrio, sino el signo de la presencia de un desorden interno que como un cáncer te destruirá gradualmente en todos los sentidos y aspectos de tu vida.
Tengan presente que aquellos que no sirven para amar su vida tampoco servirán para amar la vida de nadie más.
¿Y qué significa amar-te?... Mostrarte el camino para desarrollar tu capacidad para amarte, para volverte responsable de tu propia existencia, y de esta forma, vivir tu vida como elijas vivirla sin culpar a nadie de tus propias elecciones u omisiones.
Nadie te debe nada, todo te lo debes a ti misma (o)... También es importante que entiendas que no le debes nada a nadie. Las personas que viven en equilibrio no viven por o para nadie, tienen vida propia, por lo tanto, solo comparten el amor que viven, el amor que ella generan hacia su propia persona desde su interior.
Las personas que se aman entienden que el amor no es una cuestión que trate de darles a otros para luego poder recibir de ellos, el amor consiste en ser lo que se dices dar para no necesitar que te lo den.
Vivir en amor no significa estar solo, al contrario, si te amas, lo que te sobrará es compañía. Disfrutar de todo sin necesitar apropiarte de nadie eso es el amor coherente. La coherencia tiene que ver con lo que vives porque tú te lo das, no por necesitar que te lo den.
Las personas que viven en el drama son las que menos se aman, son las que no quieren crecer y madurar. Las personas que no se aman viven en su propio infierno del que luego tratan de culpar a los demás. Si no te amas vives con un cáncer que te pasara la factura cuando menos te lo imagines.
Sucede con frecuencia, que aunque se tenga la solución en frente, no la tomamos, porque creemos que todo en la vida le tiene que costar a los demás, nunca a uno mismo... que los demás me hagan, yo, para nada... ¿Así es como queremos implementar soluciones?...
¿Cuál es el resultado?.... preferimos vivir cagados por nuestro propio desamor, maltrato y abandono, seguimos fomentando los malos hábitos, los prejuicios y las falsas creencias, antes que hacer algo para liberarnos de la incoherencia de nuestro propio desamor... Repetimos como pericos, que el otro me haga, ¿y tú qué haces con tu vida, cuál es tu obligación?... bien gracias.
Ari Shemoth
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